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Saturday, April 14, 2012

Dealing with the Pain

Many times we deal with the pain in our lives in inappropriate ways, whether it be chronic physical pain, inward anger, guilt/resentment, or emotional hurts from bad relationships.  The problem begins when we settle for a  false "savior" to take the pain away.  An abuse of drugs, alcohol, food, sex, medications, and/or bad relationships only makes the problem worse.  Rather than face and deal with the problem head on we use these in an attempt to escape.

Christ is our only true Savior, partly because he challenges and encourages us to face the problem and overcome, rather than submit to it.  This is what he did with his disciples in the Gospel today.  After Jesus' death and Resurrection the apostles were paralyzed in fear, (feeling sorry for themselves).  They eventually became bitter and angry.  Christ approached and scolded them out of love. 

Christ calls us to overcome, just as Peter and John did in the First Reading, with a new found "boldness".  He does not want us to remain in our misery.  When we are down, rather than enable us, he challenges us to face the world (and our pain) intrepidly and proclaim the Good News "to every creature".  The Risen Christ's message to us is to "rise" above that which keeps us down and face suffering with courage.  He will give us the grace and strength! 

Lidiando con el Dolor

Muchas veces nos enfrentamos con el dolor en nuestras vidas de manera inadecuada, ya sea dolor físico crónico, la ira hacia adentro, la culpa / resentimiento o heridas emocionales de las malas relaciones. El problema empieza cuando nos conformamos con un falso "salvador" para eliminar el dolor. Un abuso de drogas, alcohol, comida, sexo, medicamentos y / o las malas relaciones sólo empeora el problema. En vez de enfrentar y lidiar con el problema de frente que usar todo esto en un intento de escapar.

Cristo es nuestro Salvador cierto sólo en parte porque él desafía y nos anima a enfrentar el problema y superar, en lugar de someterse a ella. Esto es lo que hizo con sus discípulos en el evangelio de hoy. Después de la muerte y resurrección de Jesús los apóstoles fueron paralizadas por el miedo, (sentir lástima por ellos mismos). Con el tiempo se convirtió en amargura y enojo. Cristo mismo, los reprendió por amor.

Cristo nos llama a superar, al igual que Pedro y Juan lo hizo en la primera lectura, con una nueva "valentía".  Él no quiere que nos quedemos en nuestra miseria. Cuando estamos deprimidos, en lugar de permitir que nosotros, que nos desafía a enfrentar el mundo (y nuestro dolor) intrépidamente y proclamar la Buena Nueva "a toda criatura". El Cristo Resucitado del mensaje para nosotros es el de "aumentar" por encima de lo que nos mantiene abajo y afrontar el sufrimiento con valentía. Él nos dará la gracia y la fuerza!

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